En la alopecia androgenética, la predisposición genética y el estado hormonal se consideran factores de riesgo importantes para esta afección. Varios avances recientes en biología molecular y genética han aumentado nuestra comprensión de los mecanismos de la caída del pelo en la alopecia androgenética.
Se requiere una predisposición genética y mayor sensibilidad del folículo capilar para que la DHT penetre y pueda ejercer su acción. Sin embargo, la susceptibilidad de los folículos pilosos al DHT puede ser heredada tanto del padre como de la madre. Este gen puede estar escondido por generaciones, por lo que no tener familiares calvos no es garantía de que no se padecerá calvicie 10.
No obstante, todos los varones producen andrógenos, el hecho de que unos desarrollen alopecia androgenética y otros no lo hagan depende básicamente de condicionantes genéticas se debe a que la propensión a la alopecia se transmite a través del cromosoma X:
- La mujer XX
- El varón XY
La alopecia androgénica, por lo tanto, tiene más probabilidades de depender de los antecedentes de la madre que de los del padre.
