Cuando empieces a disfrutar de tus vacaciones de verano verás que a parte de la inmensa felicidad y relax que nos aporta, nuestro pelo irá por otro camino y lo que en origen era un pelo sano y brillante se vuelve reseco e imposible de domar. ¿Las consecuencias? Todo aquello que te hizo disfrutar.
Rayos UVB y UVA
- Degradación la queratina del cabello
- pérdida de la proteína del cabello y del nivel lipídico
- Aumento de la porosidad
- Sequedad
Sal y cloro corrosivo
- La sal deshidrata la fibra del pelo y fulmina con la capa de líquidos que la rodean y protejan.
- EL cloro produce reacciones químicas con los alcalinos que se usan para los tintes.
- La sal afecta al cuero cabelludo, obstruye el folículo y produce irritaciones.
Cada vez que te bañes en el mar o piscina, aclara con abundante agua dulce.
Humedad excesiva
- Al evaporarse el agua acaba deteriorando la membrana celular del cabello.